Hace diez años, la automatización industrial allanó el terreno para la transformación digital, llevándonos al umbral de la Industria 4.0.
La relevancia de resaltar el componente humano, motivada por cuestiones de sostenibilidad y el compromiso con la innovación tecnológica constante, ha propiciado que, desde mediados de 2023 aproximadamente, nos encontremos inmersos en la era de la Industria 5.0.
Cada día observamos cómo la integración de tecnología y energía ha desencadenado una revolución sin igual, donde innovaciones como la robótica, sistemas con inteligencia artificial, el Internet Industrial de las Cosas o la computación cuántica producen máquinas como los cobots.
Por otra parte, ante crisis como el cambio climático o tensiones entre países, la Industria 5.0 debe considerar no solo la productividad, sino también aspectos humanos y ambientales en su proceso de transformación industrial.
Así, la Industria 5.0 trasciende la mera automatización y digitalización de procesos, impulsando una profunda renovación energética en los entornos industriales para minimizar el impacto ambiental y potenciar la sostenibilidad mediante la optimización de los recursos energéticos.
La transición de la Industria 4.0 a la 5.0 y sus diferencias
El recorrido hacia la Industria 5.0 ha sido sorprendentemente rápido, considerando que han transcurrido solo 250 años desde la primera revolución industrial. De hecho, desde el surgimiento de la Industria 4.0 hasta hoy han pasado poco más de diez años.
La Industria 4.0 se distingue por promover la digitalización industrial, el análisis de datos y la interconexión de procesos productivos mediante tecnologías avanzadas.
Estos progresos han hecho que las industrias sean más adaptables, personalizadas y eficientes gracias a la automatización y al seguimiento en tiempo real de las operaciones productivas y logísticas. La mejora en la gestión de recursos ha permitido a las empresas responder con mayor agilidad a las demandas del mercado.
La etapa de la Industria 4.0 aceleró la producción de bienes y servicios para la humanidad, pero no aseguró la estabilidad del sector industrial en momentos de crisis. Un caso claro fue la pandemia de Covid-19, tras la cual la Unión Europea destinó más de mil millones de euros para fomentar la transición digital, la sostenibilidad y la resiliencia. Esta crisis evidenció la necesidad de una nueva visión: la Industria 5.0.
A diferencia de la Industria 4.0, centrada en la automatización total, la Industria 5.0 valora las capacidades humanas y la creatividad, integrándolas de manera equilibrada en el proceso productivo para mejorar la calidad, la sostenibilidad y la eficiencia.
¿En qué consiste la Industria 5.0?
Contrario a lo que algunos imaginaban —una era post-Industria 4.0 con fábricas completamente robotizadas y sin espacio para los trabajadores humanos—, la realidad es muy distinta.
La Industria 5.0 es una evolución que persigue la unión de la tecnología digital con el talento humano, enfocándose en una colaboración estrecha entre personas y máquinas, y priorizando la creatividad, el potencial humano, la personalización y la flexibilidad en la producción.
De esta forma, humanos y tecnología operan en conjunto, complementándose mutuamente sin que uno reemplace al otro.
Mientras que en la Industria 4.0 los trabajadores debían adquirir competencias para manejar sistemas emergentes, en la 5.0 la tecnología se adapta al ser humano para apoyarlo, formarlo y orientarlo. Al poner la tecnología al servicio de las personas, esta era combina las fortalezas de la automatización (precisión, seguridad, repetitividad y rapidez) con las habilidades únicas del ser humano (pensamiento crítico, creatividad, razonamiento y capacidades cognitivas).
Rasgos distintivos de la Industria 5.0
La Industria 5.0 aspira a una producción que respete los límites del planeta y sitúa el bienestar social como una prioridad en el proceso productivo. Reconoce el potencial del sector industrial para alcanzar metas sociales más allá de los indicadores de crecimiento económico.
Por ello, para que una industria sea competitiva, relevante y líder a nivel global, debe basarse en los tres pilares fundamentales de la Industria 5.0: el empoderamiento humano, la sostenibilidad y la resiliencia.
El empoderamiento humano
Las prioridades de la industria ya no se limitan a incrementar la producción de bienes y servicios, sino que buscan maximizar el bienestar, las capacidades humanas y la seguridad. El propósito es lograr un equilibrio entre el bienestar social, ambiental y económico, manteniendo la rentabilidad pero incluyendo objetivos de prosperidad ambiental, social y para los grupos de interés.
Este enfoque permite mantener un ritmo elevado de producción con alta calidad y personalización según las demandas del cliente.
La sostenibilidad
El objetivo es que la Industria 5.0 desarrolle procesos circulares que reduzcan, reutilicen y reciclen recursos naturales, generando un impacto ambiental positivo.
La sostenibilidad se centra en optimizar el uso de la energía y disminuir la huella de carbono, asegurando las necesidades actuales sin perjudicar a las generaciones futuras. Es un compromiso ecológico clave para las industrias.
En este sentido, las tecnologías de la Industria 4.0 han facilitado la trazabilidad para un desarrollo sostenible, aplicando estrategias a lo largo de la cadena de valor.
La resiliencia
En tiempos de crisis, es esencial equipar a las industrias con herramientas para enfrentar adversidades, garantizando el suministro en las cadenas de valor críticas y logrando autonomía frente al ecosistema global. Para ello, se deben fortalecer estrategias de resiliencia que refuercen la robustez de la producción industrial, asegurando que las cadenas de suministro clave no se vean afectadas por fenómenos internacionales o crisis.
Ventajas de la Industria 5.0
Tras explorar los pilares de la Industria 5.0, surge la pregunta: ¿qué beneficios aporta este modelo a mi industria? Las empresas que invierten en la transición hacia la Industria 5.0 obtienen múltiples ventajas, que detallamos a continuación.
- Optimización de recursos: Al adoptar un modelo de economía circular, las empresas mejoran la gestión de recursos, aprovechándolos al máximo y reduciendo costos. Las nuevas tecnologías también elevan la calidad de los productos.
- Retención y atracción de talento: Al priorizar el valor humano, social y ecológico, las empresas fortalecen su reputación corporativa, reteniendo talento y atrayendo a nuevas generaciones.
- Competitividad: Las industrias ganan ventaja al producir con menor impacto ambiental y mayor calidad, reflejando su Responsabilidad Social Corporativa (RSC) y atrayendo a consumidores e inversores.
- Mayor resiliencia: Este modelo permite superar imprevistos en la red, las estructuras industriales o el sector, sin comprometer la cadena de valor, gracias al uso de datos, personal capacitado y técnicas flexibles como líneas de producción modular.
- Seguridad laboral mejorada: Según el Ministerio de Trabajo y Economía Social (avance a enero de 2024), se registraron 44.980 accidentes laborales con baja. La Industria 5.0 aborda este reto al usar tecnologías como IA, realidad virtual y aumentada para realizar tareas peligrosas de forma segura.
- Precisión y eficacia: Las nuevas tecnologías permiten trabajos más precisos, ágiles y efectivos, reduciendo errores y tiempos de ejecución.
Tecnologías clave en la Industria 5.0
Para integrar los pilares de la Industria 5.0, es necesario un enfoque sistémico que conecte todos los componentes, considerando cada herramienta tecnológica como parte esencial del conjunto. Combinar tecnologías maximiza su potencial.
Entre las categorías tecnológicas más relevantes de la Industria 5.0 están:
Interacción hombre-máquina
Incluye herramientas que potencian las capacidades de los operarios, como cobots, exoesqueletos, realidad aumentada, virtual o mixta.
Materiales inteligentes y bioinspirados
Abarca innovaciones inspiradas en la biología, como biosensores, materiales autorreparables, materias primas de residuos y reciclables.
Simulación y gemelos digitales
Comprende tecnologías para réplicas y pruebas, como sistemas ciberfísicos, gemelos digitales, simuladores de impacto ambiental y modelados energéticos.
Gestión de datos
Incluye herramientas para manejar datos de forma eficiente y segura, como big data, ciberseguridad multinivel y Edge computing.
Inteligencia artificial (IA)
La IA, núcleo de la Industria 5.0, potencia otras tecnologías. Ejemplos: inteligencia enjambre, interfaces cerebro-máquina y herramientas causales.
Eficiencia energética
Sistemas para optimizar energía y reducir emisiones, como energías renovables, tecnologías de hidrógeno, Power-to-X y sensores energéticos.
Conclusión
Alinearse con los objetivos de la La Industria 5.0 preparará a tu industria para enfrentar los retos del futuro.
Para iniciar la transición hacia esta era, tu empresa debe:
- Establecer alianzas estratégicas para cadenas de suministro adaptables y resistentes.
- Ofrecer formación especializada y fomentar la participación de los empleados.
- Implementar iniciativas sociales para proteger a trabajadores cuyos roles evolucionen.
- Evaluar los beneficios de estrategias sostenibles en todos los niveles industriales.